Cuando queremos decir el número de objetos o de personas, les ponemos un número delante: dos hermanos; sesenta días; 535 solicitudes… Pero también podemos usar un nombre que significa cantidad y que va seguido de de: docenas de películas; cientos de asistentes; miles de litros… En estos casos, ese nombre que significa cantidad sigue manteniendo su género original, de modo que, lo mismo que se dice una docena de huevos porque docena es femenino, debe decirse los miles de personas y no *las miles de personas o los cientos de bicicletas y no *las cientos de bicicletas.
Y otro consejo respecto de mil: no deberíamos mezclar la palabra en letra con números, escribiendo, por ejemplo, 35 mil.